sábado, 9 de mayo de 2015

Un policial como no hay otros: “Medium” (1° parte).


     Medium es una serie de televisión que se emitió originalmente entre los años 2005 y 2011 en Gringolandia, alcanzando la respetable suma de 130 episodios, gracias a las 7 temporadas que duró.  Bien se puede decir que a diferencias de muchas otras, fue cancelada en su momento de gloria, con un desenlace claramente pensado, aunque bastante polémico para muchos de sus seguidores (ya se hablará con detención sobre él hacia el final de este texto).  El programa fue creado por Glen Gordon Caron, importante productor, guionista y director de cine y televisión, cuyo principal éxito mucho antes de realizar este show, fue gestionar nada menos que la famosa  comedia ochentera Moonligthting (conocida en Latinoamérica como Luz de Luna) y quien se basó en una real médium estadounidense, la cual en más de una ocasión trabajó junto a la policía de su país para resolver crímenes.
     Se encuentra protagonizada por Patricia Arquette (actriz de renombre con una nada despreciable filmografía, que la ha hecho trabajar con algunos de los mejores directores de Hollywood y en cintas hoy de culto como True Romance de Tony Scott, Lost Highway de David Lynch y Ed Wood de Tim Burton, entre muchas otras más) en su primer trabajo para la pantalla chica y que la catapultó más que nunca al punto de recibir numerosos premios por su labor, entre ellos el prestigioso Emmy.  La Arquette fue capaz de crear a una mujer admirable, quien aparte de su labor solucionando misterios y en los cuales se involucraba a tal punto de peligrar su propia vida, lleva su vida como mujer casada y con 3 hijas de la manera más comprometida posible.  Por otro lado, destaca su personalidad que va más allá de su claro heroísmo, si no que en su rol de mujer de familia es posible reconocer en ella un aspecto maternal que la humaniza como a pocas protagonistas de este tipo de series, ya que la dulzura que la caracteriza la hace actuar de tal forma que la convierte en un personaje entrañable (viéndose, por ejemplo, su falta de rencor y gran capacidad para perdonar, virtudes pocas veces abordadas en dramas de este estilo).
     Allison Dubois es el nombre del personaje principal, quien al momento de desarrollarse el Piloto es una estudiante de Derecho y que trabaja como becaria en la oficina del Fiscal de Distrito de su ciudad, Phoenix en Alabama.  Esta mujer durante gran parte de su vida ha visto muertos, quienes se le aparecen pidiéndole ayuda para corregir uno que otro entuerto y en el cual claramente están relacionados; además tiene sueños que le entregan datos importantes sobre otras personas, aparte de tener visiones cuando toca a alguna gente u otros objetos, los que le permiten ver imágenes del pasado, presente y el futuro.  No obstante en su mayoría, todo esto le sucede con cualquier otra persona que no sea algunos de sus cercanos o si es así, por lo general se trata de hechos que se encuentran “disfrazados”, de modo que le toca a ella descubrir la verdad tras la incertidumbre que le provocan.  Esta habilidad suya la heredó de su abuela, quien era considerada la excéntrica del pueblo, incluso por su propia madre, don que a partir de la primera temporada se da cuenta que sus descendencia también la posee, además de su medio hermano menor.  Por años ignoró sus capacidades, ahogándolas en alcohol, hasta que ciertos eventos mostrados en el primer capítulo la llevan a comprometerse de una vez con lo que sabe, convirtiéndose desde entonces en una protagonista activa en la vida (y en la muerte) de un montón de personas.  A partir de entonces su cotidianeidad toma un giro de un 100%, ya que el éxito con el cual comienza sus intervenciones, la lleva a trabajar para el Fiscal (quien luego se convertirá en uno de sus grandes amigos), convirtiéndose en todo avatar del bien.  Por lo tanto, tal como se puede observar en todo esto y en lo que sucede a lo largo del programa con la familia de Alisson, temas fundamentales son los del destino, en cuanto a cómo uno asume su papel en el mundo y cómo ello conlleva a la felicidad y, por ende, a la plenitud.  Entre medio, Alisson y los suyos se enfrentan a todo tipo de misterios, que incluyen una gama de criminales, entre psicópatas, ladrones, mafiosos y en general algunos de los “monstruos humanos” más repulsivos vistos en una serie de claro raigambre policial (y se hace hincapié en lo de policial, puesto que la mayoría de las veces lo que llega a saber la heroína, o más bien las heroínas, es solo una parte de la verdad y por ello deben completar el puzle para lograr sus cometidos, con investigación incluida, ya sea de “laboratorio” y teórica, como en terreno).
    Cada episodio parte con un sueño, o bien de Allison o bien de sus hijas y a partir de ello se desarrolla su trama en la cual el mundo de lo sobrenatural se mezcla con lo cotidiano, con una sutileza que en otros programas (como por ejemplo en X-Files o Millenium) no es posible ver.  Todo esto porque Medium alterna tanto la investigación para resolver crímenes, como lo que sucede dentro de la familia de los Dubois, quienes deben lidiar entre sus  responsabilidades propias de la gente común (amistades, relaciones con el resto de sus familiares, trabajo, estudios, vecinos, vida conyugal, etc.), de modo que los guiones se articulan en base al misterio de la semana y a lo que pasa dentro del núcleo de los Dubois (quienes sin duda llegan a convertirse en una de las familias de ficción más queridas para el espectador).  Por lo tanto, los capítulos poseen una trama principal que tiene que ver con la labor de Allison y otra secundaria, dedicada a su familia (siendo muchas veces este otro arco argumental el más atractivo, debido a su carácter más intimista y sensible).  Teniendo en cuenta lo anterior, es que al tratarse de un programa que gira en torno a crímenes, no falta el elemento gore, que no deja de asombrar en sus capítulos, por mostrar con un realismo tal, que contrasta con los elementos más emotivos de la serie (incluso es posible ver imágenes chocantes que implican a niños).  No obstante todo esto es aligerado con una cuota constante de buen humor, que en parte se agradece, porque en más de una ocasión la violencia y el drama no dejan de golpear la sensibilidad de los espectadores.
     En numerosas ocasiones Alisson pasa por pequeñas crisis físicas, que hasta que  no se resuelva el nuevo caso que tiene entre sus manos, hacen que su cuerpo y su mente sean alterados de la manera más inaudita: por ejemplo, como cuando en la segunda temporada a cada rato “oye” la misma canción y en otras intermedias ve luces atrayentes en algunos objetos, o como cuando se queda sorda, no reconoce lo que dicen los demás tal como si hablaran en otro idioma, comienza a comportarse como otra persona y en la última temporada, una de sus manos comienza a actuar con vida propia, debido a un injerto de piel que le ponen (entre otras manifestaciones curiosas que en estos momentos se me escapan de la memoria).  En ocasiones son sus hijas las que pasan por procesos de este tipo.
     Si bien los capítulos poseen un carácter autoconclusivo, algunas tramas se van desarrollando de forma paulatina a lo largo de las temporadas o entre los episodios, de modo que existen argumentos que abarcan dos o más de estos y no solo entre principios y finales de temporada, sino entremedio; por lo general estos resultan ser bastante potentes y muestran lo mejor del programa (que por lo general corresponde a material sobresaliente, entre el resto de la producción que ya llega a ser notable).  El punto más alto de todo esto, vienen a ser las dos tramas que abarcan numerosos episodios entre sí, una terminada la anterior, en el transcurso de la cuarta temporada (quizás la mejor de todas).  En esta ocasión coincidió justamente con el llamado “paro de guionistas”, lo que hizo que muchas series fuesen más cortas en sus temporadas, de modo que tras haber tenido 22 capítulos en su segundo y tercer años de vida, solo contó con 16 esta vez.  No obstante ello no le hizo mella en la calidad, al contrario (a diferencia de la última temporada, la más breve de todas, con solo 13 capítulos y que en realidad bajaron bastante su nivel).  De este modo, el primero de estos dos grandes arcos argumentales contó con nada menos que Anjelica Houston como actriz invitada, importante artista de Hollywood, quien tuvo sobre sus hombros a un personaje inolvidable y cuyo final a lo largo de esta tanda de episodios, dejó a más de uno con el corazón en la boca (y los ojos llorosos).  Posteriormente en la quinta temporada, el personaje de la Houston tuvo su reencuentro con el de la Arquette, gracias a un guión que le permitió a los seguidores volver a ver a tan admirable mujer y a su vez otorgarle la redención que todo el mundo esperaba para ella.
De lo mejorcito de esta gran serie: Las intervenciones de la Houston.
   Aun cuando el programa se encuentra articulado en base al protagonismo de los Dubois y de los dos compañeros de Allison, el programa contó con personajes recurrentes desde sus comienzos.  Cada uno de estos se convirtió en todo un aporte para la serie, llegando a hacerse queridos para el espectador, quien bien aplaudía sus intervenciones y esperaba más historias de todos estos.  Dentro de estos secundarios se encuentran el padre de Joe (el marido de Allison), quien desde un principio se sabe que está muerto y el cual acostumbra tener largas conversaciones con su nuera, a veces interrumpiéndola de adrede.  A su vez se encuentra el recio jefe de policía que desde la primera temporada se hace amigo de la protagonista, ya que es a través de un caso suyo, que Allison comienza su carrera como asesora especializada.  También cabe destacar al medio hermano menor de Allison, quien resulta ser un personaje cómico y que en su última aparición fue interpretado por el propio hermano de Patricia, David (quien antes había dirigido dos episodios, pero que en su contribución de esta última temporada, contó con un guión de lo más decepcionante, por carecer del tono jocoso de las otras 3 apariciones del personaje).[1]  La madre del mismo Joe resulta ser otro punto fuerte, quien fue interpretada con una gran humanidad por una actriz solvente como Kathy Baker.  Durante las 3 primeras temporadas estuvo un abogado inescrupuloso, el cual representaba todo lo contrario del honrado Fiscal de Distrito Dévalos, pero que luego en la cuarta temporada tuvo su oportunidad de mostrar su lado más agradable.  Asimismo sobresalió un muy particular asesino en serie, quien  aún muerto hizo de las suyas y que en sus solo 3 episodios, uno por cada una de las 3 primeras temporadas, dio algunos de los momentos más sobrecogedores de Medium.  Por último, no se puede olvidar al agente del FBI con una muy particular idea de la justicia y el que en sus 3 capítulos mantuvo una relación bastante singular con la heroína.
   Siendo una serie gringa que no deja de ilustrar a la perfección el estilo de vida estadounidense, a otras culturas (como bien puede suceder con los latinos) les puede resultar inaudito aspectos que tienen que ver con las prácticas laborales de esta gente y en especial con el tiempo que le otorgan a sus trabajos y que para unos puede ser excesivo.  Es así como la jornada comienza muy temprano para los personajes, pues llegan a sus trabajos a las 7 de la mañana (y a veces antes), dedicando tiempo en la noche extra a sus responsabilidades y en muchas ocasiones los fines de semana y hasta feriados.  Se acuestan tipo 9 de la noche, lo que lo hace a uno preguntarse en qué momento se “relajan”, salvo para dormir y al respecto, cuándo hacen vida social.  En numerosos episodios a Allison la llamaron en mitad de su sueño, despertándola, quien sin vacilaciones dejó a su familia para realizar su deber.  Todo esto deja claro la enorme importancia que tiene para esta nación el compromiso con el trabajo, al punto de privarse de un montón de gustos y todo, supuestamente, ante la valoración del dinero ganado por tales sacrificios.  A su vez se puede apreciar cómo los hijos a muy temprana edad, en plena adolescencia, poseen sus propios automóviles, los que conducen como de lo más normal, con una independencia que en la sociedad latina no es habitual (por supuesto por falta de medios económicos para solventarlo).
   Los muertos que aparecen en la serie no son del tipo “aterradores” la mayoría, o sea, los espíritus que pululan alrededor de los Dubois se ven tal si estuvieran vivos y si murieron en circunstancias violentas, a lo más se ve la herida que les causó el deceso, aunque más o menos cicatrizada.  Por lo general saben que han pasado a mejor vida y los hay quienes deciden quedarse en la Tierra en vez de seguir su camino (el verdadero Más Allá nunca fue abordado en la serie, al menos no de la forma tradicional como Paraíso e Infierno).  Desde su posición de muertos, pueden ver cosas del mundo de los vivos, que solo a sus ojos está permitido apreciar, conocimiento que comparten con los médium (las Dubois no son las únicas personas en este universo ficcional que poseen dicha capacidad); también pueden enviar sueños, unos simbólicos y otros mucho más precisos, a las protagonistas, para solicitar su socorro y/o ayudarlas en sus labores justicieras.  Algunos de estos espíritus pueden poseer a los vivos con intenciones benignas o malignas, por ende existen fantasmas buenos y malos (siendo en su mayoría de intenciones positivas).
   La creatividad de los guiones es otro punto destacable a la hora de referirse a las virtudes de este espectáculo televisivo.  Esto debido al deseo de innovar a la hora de presentar las historias, en especial desde el punto de vista técnico y audiovisual.  Es así como en la segunda temporada se hizo un capítulo en 3D, mientras que el inicio de la tercera temporada incluyó dibujos caricaturescos al más puro estilo de Looney Toones. A su vez se puede mencionar el comienzo de otro episodio, homenaje claro a la clásica cinta de Brian de Palma Carrie, basada en la novela de Stephen King, que casi calcó escena por escena su estremecedor clímax. En otra ocasión se mostró a los Dubois como muñecos, mientras que en otro momento uno de los sueños de la protagonista se filmó como película muda, además de escenificar otro como si se tratara de un episodio del viejo programa Ripley, aunque usted no lo crea. La sexta temporada tuvo su propio especial de Halloween, que a su vez fue un homenaje a nada menos que La Noche de los Muertos Vivientes de George Romero, ya que en él se hizo que Allison se viera en medio de esta cinta escapando de los zombies; fue así como gracias a los efectos especiales compartió con los actores reales de tal celebrada obra y en otros momentos, se hicieron escenas nuevas como si fuesen propias de este filme (y por supuesto todo en blanco y negro).



[1] David no fue el único de la familia Arquette en participar en el programa, puesto que igualmente Rossana, la hermana de ambos, tuvo un muy divertido papel en un capítulo de antología.  A su vez uno de los hijos de Patricia también actuó en otra ocasión, siendo que además el guapo Tomas Jane trabajó sin acreditación en los dos primeros episodios de la tercera temporada (cuando ambos aún estaban casados).

Allison junto a su preciosa familia.

6 comentarios:

  1. Empece a ver la serie pero me quede en la tercera temporada, ya no la he podido volver a encontrar, y es cierto, aprovechando que muchas veces los espíritus se comunicaban en sueños, pudieron crear escenas muy originales para lo que esta uno acostumbrado.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Esta serie es increíble y recordarla gracias al proceso de escritura de este texto me ha provocado mucha nostalgia. Ojalá la pudieses ver completa, que quizás en tu calidad de esposo y padre puede llegarte aún más.

      Eliminar
    2. Si, parte de lo que me gustaba era ver como resolvían los conflictos entre los esposos, que vaya que salian muchos.

      Eliminar
    3. Bueno, en un rato más publico la 2° y última parte de este texto, que en ella cuento más cosas de esta formidable serie.

      Eliminar
  2. Lo siento, pero es una serie que no me dice nada, salvo para constatar la decadencia física de la otrora fascinante Patricia Arquette que, por cierto, ahora mismo lidera al nuevo equipo del CSI en la versión Cyber de la franquicia.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Qué increíble lo que dices sobre la Arquette, que para muchos varones aún nos parece bastante guapa y "apetecible" en esta serie. Después de todo es una mujer muy bajita, que ha tenido ya sus hijos y aún así a lo largo de "Medium" no nos parece que haya perdido su enorme atractivo. Pero dime...¿Alguna vez viste la serie? La tengo tan en mi mente y en mi corazón, que no dejo de extrañarla.

      Eliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...